La cólera aniquila la capacidad para pensar y resolver los problemas que la originan. Obviamente, la cólera es una emoción negativa. Dos emociones negativas de cólera enfrentadas no logran la paz ni la comprensión creadora.
Incuestionablemente, siempre que proyectamos la cólera a otro ser humano, se produce un derrumbamiento de nuestra propia imagen y esto nunca es conveniente en el mundo de las interrelaciones. Los diversos procesos de la cólera conducen al ser humano hacia horribles fracasos sociales, económicos y psicológicos. Es claro que también la salud es afectada por la cólera.