En muchas
oportunidades en nuestra vida nos hemos preguntado para qué estamos, cuál
es nuestro objetivo en la vida. Normalmente eludimos respondernos y llenamos
nuestro tiempo con ocupaciones que no son más que formas de esquivar el trabajo
que realmente debemos realizar. Nos inventamos responsabilidades que nadie nos
reclama como forma de sentirnos "vivos" y eludimos aquella
responsabilidad que sí tenemos, aquella que ha dado origen a nuestra existencia
como seres humanos.