Pongan el
máximo de atención. Ante todo, es necesario saber que desde el año 1 962, el 4
de febrero, entre las dos y tres de la tarde, se inició la Era de Acuario, del
Aguador. Hubo un acontecimiento que ustedes recordarán en sus memorias, me
refiero a aquel congreso de mundos, de planetas que se encontraron,
precisamente, en la constelación del Aguador. Fue verdaderamente un
embotellamiento del tránsito celeste, un encuentro de mundos. Hubo un eclipse de
sol y de luna.
Hacía muchos años que veníamos nosotros hablando de tal evento
cósmico y habíamos dado hasta la hora. Habíamos aseverado juiciosamente que tal
acontecer tendría lugar el 4 de febrero de 1962, entre la dos y tres de la
tarde. Hecho que sucedió concretamente. Teníamos como 15 o 20 años de venir
diciendo lo mismo. De manera que cuando el hecho acaeció, cuando el acontecer
llegó, a ninguno de los hermanos del Movimiento Gnóstico Internacional les cayó
de nuevo. Unicamente vieron confirmado lo que se había dicho con tanta
anticipación.
Un congreso de mundos, tal como acaeció en esa fecha y año, a esa
hora, no se da todos los días, sino únicamente cuando se inicia una nueva era.
Así pues, hechos son hechos y ante los hechos tenemos