El gran maestro Wu Wen empezó sus prácticas de meditación bajo la sabia dirección del maestro Tuo Weng. El primer trabajo de meditación se realizó con el siguiente koan o frase misteriosa: "No es la mente, no es el Buddha, no es nada"
Wu Wen sentado al estilo oriental concentraba su mente en esta frase tratando de comprender su honda significación.
Realmente este koan o frase enigmática es difícil de comprender y, meditando en ella, con el sano propósito de experimentar la verdad encerrada en cada una de las palabras contenidas en esta frase misteriosa, es claro que al fin la mente, no pudiendo conocer su significado, cae vencida, como herida de muerte, entonces se resigna, quedando quieta y en silencio.
El maestro chino Wu Wen tuvo la dicha de encontrarse con Yung Feng y Yueh Shan, y algunos otros hermanos, y todos juntos se comprometieron a trabajar para alcanzar la iluminación.
Después de algún tiempo Wu Wen fue hasta el maestro Huai Shi, quien le enseñó a meditar con ayuda del mantram sagrado WU. Este mantram se canta mentalmente con la letra U repetida dos veces U ... U... alargando el sonido vocal, como imitando el sonido del huracán cuando aúlla entre la garganta de la montaña, o como el golpe terrible de las olas contra la playa.