Analizando detenidamente el bípedo tricerebrado llamado hombre, llegamos a la conclusión lógica de que todavía no tienen un centro permanente de conciencia.
No podemos asegurar que los bípedos humanos estén individualizados, estamos seguros y muy seguros que sólo están Instintivisados.
El querido ego no tiene individualidad alguna, es una suma de factores de discordia, una suma de pequeños yoes, (legión de diablos)
El cuerpo bípedo tricerebrado es una máquina maravillosa que el yo daña miserablemente.
La legión del yo en cinta sucesiva pasa por la pantalla de la mente dándole a esta distintos coloridos de instante en instante.
Cada pequeño yo de los que constituyen la legión denominada ego, tiene realmente su propio criterio personal, sus propios proyectos, sus propias ideas.