Han transcurrido muchísimos millones de años evolucionando e
involucionando lentamente desde la noche aterradora del pasado y todavía el ser
humano no sabe quién es, ni de dónde es, ni hacia dónde va.
Un sopor de muchos siglos pesa sobre los antiguos misterios y el
Verbo aguarda en el fondo del arca, el instante de ser realizado.
Tras de la tradición edénica hay desideratos cósmicos terribles, y
equivocaciones sagradas que espantan y horrorizan. Los dioses también se
equivocan.
Y hoy como ayer, estamos enfrentados ante nuestro propio destino.
Estamos ante el dilema del ser y del no ser de la filosofía.
Mucho se ha hablado sobre la serpiente sagrada y hoy vamos a
hablar claramente sobre el órgano kundartiguador.
Dioses y Devas, Avataras y reyes divinos, han luchado desde hace
millones de años para acabar con las consecuencias del órgano kundartiguador.